Con el ánimo de mantener vivo el contacto con el público lector, la Editorial Boloña presentó este miércoles en la calle de Madera en la céntrica Plaza de Armas, como parte de las actividades de la edición 32 de la Feria Internacional del Libro de La Habana, la línea de publicaciones digitales de su sello editorial.
Magda Resik, directora de Comunicación de la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana y de la propia casa editorial, precisó que se trata de la apuesta de Boloña por los nuevos tiempos, buscando la conexión con los infinitos caminos del lenguaje digital, y a la vez, con un público que lee en otros escenarios y de múltiples modos.
Asimismo, anunció al público invitado que se trata de disfrutar de estas nuevas publicaciones que se han distinguido a lo largo del tiempo por una belleza y estética determinada, veladoras de la edición y de los detalles de sus portadas.
Nuevos títulos que abren universos distintos pasando por la investigación, el periodismo y los más diversos géneros literarios con el fin de apropiarse de una identidad propia, tal como sucede con la Colección del Historiador, cuyos objetivos están dirigidos a compilar el pensamiento de Eusebio Leal Spengler en varias temáticas del acontecer de la isla.
En este sentido, la Editorial Boloña, según declaraciones de Magda Resik, busca colocar y posicionar en este entorno del libro digital todas las publicaciones de Leal, que puedan ser beneficiadas en este tipo de formato tan práctico e instantáneo. En tanto que la propia falta de papel reclama la correspondencia de una escritura con su misma naturaleza, y con los escenarios de un contexto cada vez más colonizado por la industria del entretenimiento.
El libro de la Editorial Boloña El silbo de la paloma, a cargo de Pedro Prada y con la edición de Eliana Dávila y el diseño de Gretel Ruíz-Calderón González, fue presentado en diálogo íntimo con su autor y en la compañía de Omar Valiño, reconocido crítico teatral y director de la Biblioteca Nacional de Cuba.
Magda Resik, en calidad de presentadora, destacó las cualidades del autor como investigador de la historia, resaltando sus competencias diplomáticas como Embajador de Cuba en otras naciones, y de su exquisita sensibilidad hacia el arte y la literatura.
También valoró su capacidad para contarnos, como cubanos, las tantas lecturas de la historia y de sus hechos inéditos, recreándola de un modo muy seductor, percibiendo el sentido de lo emotivo, hilando con fino bordado el tejido social de una época, y tramando desde la ficción el juicio de la verdad.
El silbo de la paloma es un relato familiar de tipo testimonial que se adentra en la candidez de una herencia isleña, proveniente de Islas Canarias, y de su recurrente impronta en la provincia de Las Villas. Su autor, Pedro Padra, habló de su aprendizaje acerca del relato de la historia y de sus connotaciones y apropiaciones como lector omnipresente. Un periodista que escribe con la sensatez de la indagación para sentir la historia como un relato vivo de cuentos y leyendas. Una idea valorada en sus más cercanas influencias con otros autores, interesados en explorar las costumbres del campo cubano, como sucede con los nombres de los villaclareños René Batista Moreno, Onelio Jorge Cardoso y Samuel Feijóo.
Conectado con la espiritualidad de lo cubano, Pedro Prada recordó su texto La secretaria de la República, que también busca en esos espacios de la intimidad personal el relato de lo histórico, y en este particular, considerando la historia de Conchita Fernández.
Este nuevo texto de su producción intelectual, El silbato de la paloma, es toda una metáfora visual a la identidad de lo cubano en su herencia más estrecha con España. Una suerte de homenaje a los descendientes y emigrados canarios en Villa Clara, que llenaron sus recuerdos de frases, ideas, sentimientos y casi que, con su propio estilo muy cubano, de la apropiación de un silbato que anuncia la llegada de lo nuevo.
Por su parte, el director de la Biblioteca Nacional José Martí, Omar Valiño, describió este libro y a su autor como esos ejemplos de una lectura a la que llegas de una vez y no quieres escapar. Son complicidades de una microhistoria que descansa en una realidad más que ficcionada, documental, interesada en registrar las singularidades de una historia a partir de una verdad. En este sentido, reconoció que se trata de un autor que se descubre ante su imaginación, reconstruyendo los lazos familiares de quien se interroga y se responde, de quien habla de los suyos como el propio silbido de la paloma.
Otros títulos digitales forman parte de esta colección de Ediciones Boloña (e-books), donde aparecen títulos como: De Peña Pobre, de la autoría de Cintio Vitier; 27 de noviembre de 1871, a cargo de Fermín Valdés Domínguez; Hay que creer en Cuba, de Magda Resik Aguirre, y México en el alma Leal de Cuba, de los autores Magda Resik y Miguel Hernández Montesino.
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Tomado de Habana Radio
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