
Erik Axel Karlfeldt (20 de julio de 1864 – 8 de abril de 1931) fue un poeta sueco cuya poesía altamente simbolista disfrazada de regionalismo fue popular y le valió el Premio Nobel de Literatura de 1931 póstumamente después de haber sido nominado por Nathan Söderblom , miembro de la Academia Sueca.
El poeta, inicialmente, se llamaba Erik Axel Eriksson, pero adoptó su nuevo nombre en 1889 para distanciarse de su padre, quien había sufrido la deshonra de una condena penal. Estudió en la Universidad de Uppsala y al mismo tiempo impartía clases en una escuela para adultos en la ciudad de Estocolmo.
En 1904, Karlfeldt fue elegido miembro de la Academia Sueca y ocupó el sillón número 11. En 1905, fue elegido miembro del Instituto Nobel de la academia y, en 1907, del Comité Nobel. En 1912, fue elegido secretario permanente de la academia, cargo que ocupó hasta su fallecimiento.
Su poesía, esencialmente regional y ligada a la tradición, fue extremadamente popular y tuvo fuertes vínculos con la cultura campesina de su tierra natal rural, los cuales siguieron siendo una influencia dominante en él durante toda su vida.
Karlfeldt publicó sus obras más importantes en seis volúmenes de verso: Vildmarks- och kärleksvisor (1895; Canciones del desierto y del amor), Fridolins visor (1898; Canciones de Fridolin), Fridolins lustgård (1901; El jardín de placeres de Fridolin), Flora och Pomona (1906; Flora y Pomona), Flora och Bellona (1918; Flora y Bellona), y finalmente, cuatro años antes de su muerte, Hösthorn (1927; El cuerno de otoño).
Erik Axel Karlfeldt fue un apreciado poeta neorromántico cuya ocasional complejidad artística era más emocional que intelectual.
Compartimos tres poemas de su autoría:
Canción de serpientes
Cuando voy por los campos llevo siempre mi botella, sólo porque el licor fuerte es buen antìdoto contra el veneno de las serpientes. Pero si pienso en serpientes me acuerdo de otra, falsa, engañosa, mucho peor aún que ellas. Se dice que la serpiente acecha bajo árboles verdes, mirando suave y atrayente el grácil pajarillo. Pero la muchacha va por todos los caminos, su vista aguda lo abarca todo: ve una chaqueta allá, oye acullá un par de botas. La serpiente arrastra la tripa, no come más que tierra, pero la muchacha prefiere el dulce, y plato de plata en la mesa. La serpiente aprende a bailar para distraer a los tontos, pero la niña empieza a bailar en el vientre de su madre. La serpiente no muda piel más que una vez al año, pero la muchacha muda la suya ocho veces a la semana. Si la serpiente te engaña te morderà los talones, pero engaño de mujer taladra el alma de un muchacho. Termina así mi canción sobre animales dañinos y me apresuro, bosque adentro, a la jaula de mi muchacha.
***
Mi herencia se llama añoranza
Mi herencia se llama añoranza, castillo en los valles de lo que me falta. Resuena en sus salas extraño sonido de cuerdas pulsadas.
***
Nada es como esperar que
Nada es como esperar que, semanas de inundaciones de primavera, momento en ciernes, ninguna de mayo para una extensión de la luz como la edición de abril de motivos. rastro terminó último deslizamiento, bosque da su frescor dävna y su profundo murmullo de modo. el placer del verano, quiero donar para las primeras cerdas, que brillan en un pino oscuro inferior, y el primer taladro de la candidiasis. Nada es como los tiempos de anhelo, väntansår, trolovningstider. Nadie era un reflejo diferenciales como un amor secreto. Rara vez se encuentran, en lugar distinguido a fondo, soñar con todo lo dulce y peligroso la vida que llevaba en su vientre! frutos de oro puede sacudir segundo; Quiero permanecer y abandonar, en mi jardín, quiero ver, mientras que los árboles que florecen allí.
Visitas: 44
Deja un comentario