Un investigador acucioso como el doctor Eduardo Robreño consideró a Federico Villoch como el más «fecundo de los autores teatrales nacidos en Cuba».
Las temporadas de teatro costumbrista efectuadas en el Alhambra resonaron durante varias décadas. Se calcula, pues muchas de las obras se perdieron, que Villoch escribió alrededor de 400, entre sainetes, operetas, parodias, revistas y zarzuelas, algunas de ellas muy recordadas, como La isla de las cotorras, La danza de los millones, La República Griega, La casita criolla, El rico hacendado, etcétera, hasta su última obra: la zarzuela Guamá, estrenada en el Teatro Martí en 1936, con música de Rodrigo Prats.
Autor de arraigo popular, Villoch buscó y halló sus temas entre los problemas sociales y políticos de la época. De ahí la identificación que logró siempre con el público. Contó, además, para la música de estas obras, con la participación de uno de los grandes del pentagrama cubano: el maestro Jorge Anckermann.
La vida y la obra de Federico Villoch están vinculadas de manera indisoluble al esplendor del teatro Alhambra, de la esquina habanera de Consulado y Virtudes, que diera su primera función el 13 de septiembre de 1890.
Pero Villoch tuvo su estreno como autor en el antiguo teatro Irijoa (hoy Martí), el 6 de mayo de 1896. La obra se tituló La mulata María y con ella alcanzó su primer gran éxito de taquilla.
En adelante, centraría sus esfuerzos en la producción de sainetes y revistas para el teatro Lara, hasta que, a finales de noviembre de 1900, alquiló, en unión con otros dos empresarios el teatro Alhambra, donde se mantendría hasta febrero de 1935, fecha en que las paredes del viejo coliseo se vinieron al piso.
Después de escribir por espacio de cuarenta años para el teatro, retornó a una antigua pasión juvenil, el periodismo, y con elegante prosa costumbrista hizo populares los artículos que tituló «Viejas postales descoloridas», aparecidos en el Diario de la Marina.
Dejó inédita una novela sobre el tema de la independencia: Marta Flores.
El empresario y escritor de libretos del célebre Alhambra murió en La Habana, el 11 de noviembre de 1954. Había nacido 86 años atrás, el 16 de octubre de 1868, en el barrio rural de Ceiba Mocha, muy cercano a la ciudad de Matanzas.
Visitas: 31
Deja un comentario