La danza en la órbita de Orígenes, del doctor Pedro Simón Martínez, director del Museo Nacional de la Danza, y de la Revista Cuba en el Ballet, publicado por la hispana Ediciones Cumbres, es el título del volumen, con prólogo de la doctora Ivette Fuentes de la Paz (1953-2024), y coordinación del periodista José Ramón Neyra, que el autor pone a disposición de los amantes iberoamericanos de la danza y la literatura.
Ese bien documentado texto, en el que dichas disciplinas artísticas se funden en cálido abrazo, deviene una aproximación a la fecunda trayectoria artístico-profesional y existencia terrenal de la prima ballerina assoluta Alicia Alonso (1920-2019), directora fundadora del Ballet Nacional de Cuba (BNC), Patrimonio Cultural de la Nación, y punto focal o eje central de una relación afectivo-espiritual estrecha y cercana con escritores, artistas e intelectuales que integraron el emblemático grupo Orígenes (1944-1956), que jerarquizara el ilustre poeta y escritor José Lezama Lima (1910-1976).
Es una obra que tiene sus antecedentes en las experiencias y vivencias de la labor investigativa desarrollada por Simón Martínez en la Casa de las Américas, y sus fructíferos encuentros con el eminente autor de Paradiso; gigante de la intelectualidad cubana contemporánea con el que se vinculó gracias a una pesquisa que emprendiera sobre la obra lezamiana la pareja sentimental de la eximia ballerina durante más de cuatro décadas.
De acuerdo con el principal artífice de esa joya de la literatura especializada, los integrantes del Grupo Orígenes renovaron la poesía y el concepto de la literatura, desde 1940 hasta nuestros días, y que al indagar en la esencia poética y estético-artística de ese legendario grupo, descubrió —entre otras cosas― que no se habían destacado los valores y alcances de Orígenes en torno a la danza; vínculo que, sin embargo, se ve reflejado de forma emotiva en las lisonjas dedicadas a Alicia Alonso o a Antonio Gades (1936-2004) por parte de varios escritores, sobre todo por la multilaureada poetisa y ensayista Fina García Marruz (1923-2022), Premios Nacional de Literatura 1990, Iberoamericano de Poesía «Pablo Neruda» 2007 y «Reina Sofía» 2011. Y junto con Fina, los poetas y escritores Gastón Baquero (1914-1997), Cintio Vitier (1921-2009), Eliseo Diego (1920-1994), y Virgilio Piñera (1912-1979), el artista de la plástica René Portocarrero (1912-1985) y la propia Alicia Alonso.
La danza en la órbita de Orígenes constituye —por derecho propio― un acercamiento a las letras hispanoamericanas.
En la presentación de la antología en su tercera edición, la primera en la península ibérica y las dos anteriores en la mayor isla de las Antillas, el doctor Ernesto Sierra, escritor y profesor universitario, destacó los detalles enaltecedores que les dedican tan distinguidas plumas a la danza, como expresión consustancial con el ser humano en su vínculo primigenio con la música, la pintura y la poesía.
Para finalizar esta reseña, dejo al lector con una sentida valoración crítica que Fina García Marruz incluyera en el texto Alicia Alonso en el país de la danza, que viera la luz en 1974:
Cuando Alicia entra en el país de esas maravillas, después de haber hallado como una llave perdida, impulsada por la corriente de las aguas de toda esa pérdida cuando —ni cisne, ni ángel— entra, con su noble medida humana, [en] el reino de esa gravedad vuelta gracia […].
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