A dos importantes autores cubanos nos referiremos hoy en la cuarta entrega de la serie mensual «Los poetas de noviembre»: José Jacinto Milanés y Emilio Ballagas.
Considerado como el primer ingenio poético cubano, José Jacinto Milanés falleció el 14 de noviembre de 1863. Su actividad literaria estuvo muy influenciada por Domingo del Monte, su amigo y consejero.
De su autoría es el drama El Conde Alarcos, que contó con una gran repercusión en el movimiento romántico cubano (su periodo creativo se enmarca en el romanticismo de la literatura española, y también colaboró con varios periódicos y revistas de La Habana y su natal Matanzas.
Un revés amoroso marcó el resto de su vida, sumiéndolo en un desequilibrio mental, que logró superar en un primer momento pero que le provocó una recaída sin que pudiera reponerse. Falleció sin cumplir 50 años.
Por su parte, Emilio Ballagas nació el 7 de noviembre de 1908 en Camagüey, y su obra le hace ser considerado uno de los más importantes cultivadores del neorromanticismo y la poesía negrista en la isla.
Poesías suyas aparecieron en publicaciones de la época, y fue colaborador de las más importantes revistas y publicaciones de Cuba y América Latina. Asimismo, publicó diversos libros, y de ellos Cielo en rehenes le hizo merecedor del Premio Nacional de Poesía en 1951.
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