El Instituto Cubano del Libro (ICL) es la institución rectora de la edición, comercialización y promoción de libros y publicaciones seriadas en Cuba, así como de las relaciones del Estado con los escritores, sus organizaciones representativas y los profesionales del libro. Está subordinado al Ministerio de Cultura, cuya política cultural ejerce en toda su estructura ramal, mediante el diálogo permanente y la participación activa de los intelectuales en la formulación de sus programas y proyectos, y las opiniones recibidas de los distintos públicos sobre su labor.
Fundado en 1967 mediante la ley 1203, agrupa a las editoriales surgidas en el proceso de desarrollo del libro en la Revolución, junto a la poligrafía nacional y a la red distribuidora y comercializadora del libro. Tiene como antecedentes la Imprenta Nacional de Cuba, fundada por Fidel el 31 de marzo de 1959, y la creación de la Editorial Nacional de Cuba en 1962.
Su primer título publicado fue El Ingenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha, en cuatro volúmenes y con una tirada de 100 000 ejemplares, que se vendieron al módico precio de $0.25 cada tomo. Tal acontecimiento marcó la pauta de lo que sería el sistema editorial cubano, sin precedentes en la historia de nuestro país y de América. En este sentido, baste recordar lo vital que fue para el cubano de entonces el papel que jugaron el proyecto Ediciones R, las coediciones con el extranjero y la creación de una empresa en el Ministerio de Comercio Exterior encargada de la importación y exportación de libros y revistas.
En 1976, el Instituto del Libro se integró al Ministerio de Cultura. Poco antes, la Comisión del Sistema de Dirección de la Economía había tomado la decisión de trasladar las librerías a los órganos locales del Poder Popular. En los años 80, se traspasaría al MINED la Editorial Pueblo y Educación y se desprenderían las imprentas, que se incorporaron a la Integración Poligráfica. Con los elementos que restaban se reinstituyó el Instituto, subordinado al Ministerio de Cultura.
A más de 50 años de su fundación, el ICL es una institución relevante para la vida cultural de la nación, a través de las variadas acciones culturales que organiza durante el año y que realizan las entidades que integran el sistema del libro en Cuba.
La actividad rectora del Instituto se ejerce sobre el sistema editorial del país que en catorce territorios cuenta con un Centro Provincial del Libro y la Literatura (CPLL), subordinado a las direcciones de cultura y a través de los cuales se implementa la política cultural referida al libro, sus autores y los lectores.
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