El 6 de agosto de 1936, desde su exilio en Nueva York, el joven intelectual Pablo de la Torriente Brau escribe en una de las misivas enviadas a Cuba: 𝘏𝘦 𝘵𝘦𝘯𝘪𝘥𝘰 𝘶𝘯𝘢 𝘪𝘥𝘦𝘢 𝘮𝘢𝘳𝘢𝘷𝘪𝘭𝘭𝘰𝘴𝘢, 𝘮𝘦 𝘷𝘰𝘺 𝘢 𝘌𝘴𝘱𝘢ñ𝘢, 𝘢 𝘭𝘢 𝘙𝘦𝘷𝘰𝘭𝘶𝘤𝘪ó𝘯 𝘌𝘴𝘱𝘢ñ𝘰𝘭𝘢. [...] 𝘓𝘢 𝘪𝘥𝘦𝘢 𝘩𝘪𝘻𝘰 𝘦𝘹𝘱𝘭𝘰𝘴𝘪ó𝘯 𝘦𝘯 𝘮𝘪 𝘤𝘦𝘳𝘦𝘣𝘳𝘰, 𝘺 𝘥𝘦𝘴𝘥𝘦 𝘦𝘯𝘵𝘰𝘯𝘤𝘦𝘴 𝘦𝘴𝘵á 𝘪𝘯𝘤𝘦𝘯𝘥𝘪𝘢𝘯𝘥𝘰 𝘦𝘭 𝘨𝘳𝘢𝘯 𝘣𝘰𝘴𝘲𝘶𝘦 𝘥𝘦 𝘮𝘪 𝘪𝘮𝘢𝘨𝘪𝘯𝘢𝘤𝘪ó𝘯. Leer más