«¡Caballeros! ¡Esta expedición tiene que llegar a Cuba!», y se nos aguan los ojos. «Tira bien, mocoso. No te encasquilles. Te quiere, mamá». «¡El Puerto Rico no se rinde!», y ya estamos llorando a moco tendido. Tenía que llamarse Juan, el más sencillo y llano de los nombres de cubanos. Ni que fuera a propósito. […] Leer más