La Editorial Ácana de Camagüey publicó en el año 2014 la investigación Memorias del Ballet de Camagüey. La autoría de este texto corresponde a Lourdes María Cepero Estrada quien por muchos años fungió como pianista de esta agrupación. Al lado de este trabajo la Cepero se ha desempeñado como profesora de la Universidad de las Artes en su filial de Camagüey y como directora del prestigioso dúo de música de cámara A Piaccere.
Publicó anteriormente en la misma editorial su tesis de maestría, El espíritu tangible del sonido. La música en el ballet con el que obtuvo mención en el premio anual de investigaciones del Instituto Cubano de Investigación Cultural Juan Marinello. Con una sólida formación musical y una amplia cultura balletística la autora, en este libro, se adentra en la difícil tarea de trazar la historia del Ballet de Camagüey. Así, se preserva no solo el andar de lo que fue una compañía emblemática para el país, sino también se trazan las coordenadas que dieron lugar al nacimiento de la misma y su desempeño hasta el final de la centuria pasada.
No falta la gratitud enorme a ese Maestro que fue Fernando Alonso y a la impronta que dejó en la formación de bailarines coreógrafos de esta compañía. A él se debió, no hay lugar a dudas, el enorme despegue nacional e internacional de la agrupación danzaría. La autora además señala que:
Las fundadoras Manelín Rodríguez y Gloria Padrón me ofrecieron amablemente sus testimonios, así como las maestras Menia Martínez y Lila Martínez de la Torre. También me concedieron entrevistas los coreógrafos José Antonio Chávez y Osvaldo Beiro, la coreógrafa y directora del Ballet Contemporáneo Endedans Tania Vergara, Jorge Lucas Castellanos (Lucky), Jorge Lozano, Rafael Saladrigas, Elda Armengol y Diego Montoya.[1]
Los entrevistados aportaron importantes datos sobre la agrupación danzaria, pero la autora hurga en la historia de la región y demuestra cómo desde el siglo XIX hubo un gusto por la ópera, el ballet y el teatro unido a un muy especial desarrollo de la música de conciertos. Basta decir que una de las figuras que cantó en 1850 en esta ciudad fue Adelina Patti, tan admirada por nuestro José Martí.
Por tanto, la investigadora sigue el trazado de la historia cultural que desemboca y explica el por qué de esta compañía hoy. El libro contiene el catálogo de todas las obras estrenadas desde 1967 hasta el 2012 con sus primeros bailarines, coreógrafos, música y otros datos de interés.
Sirva este texto como un importante aporte a los estudios acerca de la cultura desde el punto de vista regional en nuestra Isla y como obligada referencia a cualquier investigador de la historia de la danza que se respete pues, esas páginas son parte del patrimonio cultural de una nación que se precisa defender.
Notas.
[1] Lourdes Cepero Estrada: Memorias del Ballet de Camagüey. Ed. Ácana, Camagüey, 2014, p.13
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